Continuamos con las reseñas de Antes de Watchmen.
La anterior:
Interesante serie, donde en el primer capítulo nos muestra a Dan Dreiberg (Búho Nocturno II) de pequeño, sus motivaciones para convertirse en héroe, siendo antes de nada un "fan" (hoy en día diríamos friki) del Búho original, motivado por su necesidad de encontrar un refugio mental a una brutal realidad, su infancia de maltratos hacia él y su madre, por parte del padre.
Se gana el privilegio de ser instruido por su héroe, justo cuando él ya está pensando en retirarse. Una vez aparece como el nuevo Búho, se alía con Rorschach, que será el principal personaje secundario del resto de la serie, en algunos tramos, igual de protagonista. Podemos ver, una vez más, otro punto de vista de la famosa reunión de los Crimebusters en 1966. El Rorschach que se muestra aquí es menos extremo, más controlado de lo que vemos en Watchmen. Cosa en la que ayuda su relación con Búho Nocturno, ya que no solo se complementan, sino que se compensan mutuamente.
El caso principal que llevan los dos héroes, y que les toma los 3 números restantes de la serie, hace que se encuentren con Lady Crepúsculo, un personaje que aparece en la obra original de Moore de forma muy solapada (apenas un comentario en un par de viñetas de una foto suya dedicada a Dan), con la que Búho Nocturno tendrá un affair, y que provocará tensiones con su compañero justiciero, Rorschach. Para definirla, sería Catwoman (en extremo) si Búho fuera Batman.
El final de la serie nos sitúa en un status muy cercano a lo que sería el comienzo de Watchmen, con Búho y Rorschach trabajando cada uno por su cuenta, y con Hollis (el Búho original) dejando de ser un ideal impoluto para Dan, pasando a ser una figura paternal, con sus defectos. Todo ello relacionado con el libro que éste está escribiendo, claro.
La historia me ha encantado, aunque se me ha hecho, digamos, corta. Es decir, aparte del primer número, que nos muestra la transición de un Búho Nocturno al otro (resumidamente) y el origen y motivación de Dan Dreiberg, el resto de la serie es una sola aventura, muy puntual (aunque quizás importante y con repercusiones notables para sus personajes). En contraposición a otras series, como Minutemen, donde la historia abarca un gran periodo de tiempo. A lo que me refiero es que me ha sabido a poco, que podría leerme todos los meses un nuevo número de las aventuras de Búho Nocturno y Rorschach. No estaría mal, no señor...
Hay que apuntar que esta serie también fue el último trabajo que realizó el gran Joe Kubert, que entintó a su hijo Andy hasta que falleció. Fue sustituido por Bill Siekiewicz en el número 3.
ANTES DE WATCHMEN: RORSCHACH (miniserie de 4 números, guión Brian Azzarello, dibujo: Lee Bermejo)
Por una parte, comenzando a leer esta serie, tenía una sensación de disgusto, de que el guionista, a pesar de estar bastante especializado en este tipo de personajes, no había elegido bien el argumento para este icónico protagonista. Pero una vez terminada, debo confesar que me ha gustado bastante. Está claro que no se podía contar una típica historia de origen, pues creo que Rorschach es el personaje de Watchmen cuyo origen estaba más que explicado en la obra original. Así que finalmente me parece un acierto haber situado el trascurso de los acontecimientos en 1977, el año en que se aprueba la ley contra los justicieros enmascarados, época de tumultos, de pandillas callejeras... e incluso del famoso apagón de Nueva York. Azzarello nos describe una ciudad inmunda, que parece salida de Taxi Driver (hasta se hace un pequeño homenaje al personaje que encarnó De Niro). Los dibujos de Bermejo, impresionantes, extremadamente realistas y brutales.
Podemos ver a un Rorschach ya maduro, implacable. se nota que han pasado los años desde los acontecimientos de la serie de Búho Nocturno. Aunque recibe bastante en la serie, mantiene sus ideales. Incluso, a pesar de estar ya en su época más extrema, nos muestran que algo de "humanidad" sí le queda, con la relación que mantiene con la camarera del bar que frecuenta desde hace años. Es, al final, el verdadero rostro de la sociedad, bajo el manto del citado apagón, el monstruo más oscuro y peligroso de todo el comic. Ni Rorschach, ni el malvado Rawhead, ni siquiera el asesino en serie. Los propios ciudadanos de a pié. Toda una verdad, hay que admitirlo.
Hasta ahora, es la serie de Antes de Watchmen más independiente respecto a la obra madre. Aunque, la verdad, no se hecha de menos ninguna aparición estelar de alguno de sus compañeros justicieros.
ANTES DE WATCHMEN: EL COMEDIANTE (miniserie de 6 números, guión Brian Azzarello, dibujo: J.G. Jones)
Podemos ver a un Rorschach ya maduro, implacable. se nota que han pasado los años desde los acontecimientos de la serie de Búho Nocturno. Aunque recibe bastante en la serie, mantiene sus ideales. Incluso, a pesar de estar ya en su época más extrema, nos muestran que algo de "humanidad" sí le queda, con la relación que mantiene con la camarera del bar que frecuenta desde hace años. Es, al final, el verdadero rostro de la sociedad, bajo el manto del citado apagón, el monstruo más oscuro y peligroso de todo el comic. Ni Rorschach, ni el malvado Rawhead, ni siquiera el asesino en serie. Los propios ciudadanos de a pié. Toda una verdad, hay que admitirlo.
Hasta ahora, es la serie de Antes de Watchmen más independiente respecto a la obra madre. Aunque, la verdad, no se hecha de menos ninguna aparición estelar de alguno de sus compañeros justicieros.
ANTES DE WATCHMEN: EL COMEDIANTE (miniserie de 6 números, guión Brian Azzarello, dibujo: J.G. Jones)
Al igual que hizo en la serie de Rorschach, Azarello sitúa la acción de esta historia en uno de los momentos más oscuros del personaje. Blake, el Comediante, sirve al gobierno de los USA durante los años 60, en plena guerra fría. Nos muestra por una parte una muy buena relación con la familia Kennedy, y gran amistad en especial con JFK. Esto en contraposición a lo que se insinuaba en la obra original, y se mostraba de forma explícita en la película de Watchmen, donde lo culpaban del asesinato del presidente. Aunque, al final de la serie, una vuelta de tuerca nos puede hacer dudar de todo ello.
También vemos como interviene (y de forma muy relevante) en el comienzo de la guerra de Vietnam, así como en su desarrollo, a excepción de la finalización del conflicto, con la ayuda del Dr. Manhattan, que ya se había mostrado en Watchmen, y que ocurriría justo después de esta miniserie. De hecho, el final de esta historia tendría como consecuencia la incorporación del poderoso superhombre azulado a la ofensiva en Vietnam.
Blake nos muestra toda una gama de grises y claroscuros en esta historia, donde además de la relación con los Kennedy, el ejército y la CIA, lo vemos interactuar brevemente con Moloch, Búho Nocturno y Rorschach, así como un leve cameo de Laurie (Espectro de Seda II). No solo se sitúa la acción en Vietnam, también tenemos un interesante episodio en suelo americano, justo en las revueltas y manifestaciones de mediados de los 60.
Una muy interesante historia de Azarello, en definitiva, acompañada de un excelente dibujo, lleno de simbolismos y guiños, de J.G. Jones, donde se nos muestra tanto la crudeza de la guerra de manera muy explícita, como momentos históricos bastante bien documentados. Una gozada.
Continúa en:
Antes de Watchmen 3
También vemos como interviene (y de forma muy relevante) en el comienzo de la guerra de Vietnam, así como en su desarrollo, a excepción de la finalización del conflicto, con la ayuda del Dr. Manhattan, que ya se había mostrado en Watchmen, y que ocurriría justo después de esta miniserie. De hecho, el final de esta historia tendría como consecuencia la incorporación del poderoso superhombre azulado a la ofensiva en Vietnam.
Blake nos muestra toda una gama de grises y claroscuros en esta historia, donde además de la relación con los Kennedy, el ejército y la CIA, lo vemos interactuar brevemente con Moloch, Búho Nocturno y Rorschach, así como un leve cameo de Laurie (Espectro de Seda II). No solo se sitúa la acción en Vietnam, también tenemos un interesante episodio en suelo americano, justo en las revueltas y manifestaciones de mediados de los 60.
Una muy interesante historia de Azarello, en definitiva, acompañada de un excelente dibujo, lleno de simbolismos y guiños, de J.G. Jones, donde se nos muestra tanto la crudeza de la guerra de manera muy explícita, como momentos históricos bastante bien documentados. Una gozada.
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Antes de Watchmen 3
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