Hace unos días puede ver la segunda entrega de Thor en solitario. Si bien tengo que admitir que me gustó bastante (más que la primera, por descontado), también he de decir que extrañamente se me hizo muy corta. Quizás porque mantenía la acción lo suficiente como para no aburrirte o notar altibajos. Quizás porque en sí el argumento me pareció demasiado simple, y con pocas sorpresas. Un segundo visionado me sacará de dudas... pero eso será cuando salga a la venta, seguramente.
OJO! A PARTIR DE AQUÍ PUEDE HABER SPOILERS!
Me encantó como se planteaba Asgard y la leyenda de los Elfos Oscuros, con esa mezcla de CIFI a lo Star Wars/Star Trek y Fantasía Tolkieniana. Para mi gusto, faltaban minutos de la bella Sif, mientras que el excesivo protagonismo de Natalie Portman me resultó cansino. Vale, admito que me van más las morenas...
¿Lo mejor de toda la peli? Sin duda Loki, que se sale tanto en interpretación como en momentos épicos, incluido el final, aunque se viera venir, y esas escenas pseudo-cómicas con los aliados de Thor amenazándole por si traiciona a su hermano, o el impagable momento donde crea una ilusión mofándose del Capitán América (mira, esto sí me sorprendió).
Algo que me desconcertó mucho fue la forma de narrar la resolución del enfrentamiento con Malekith. con esas escenas contadas desde el punto de vista de la reunión clandestina de Thor con sus colegas, alternando la preparación del plan con la ejecución de éste, como si de una película de atracos a bancos o golpes a casinos se tratase. No encajaba con el aspecto general del film, a mi parecer.
La primera escena post-créditos, algo forzada para introducirnos en la próxima Guardianes de la Galaxia, y la segunda sin nada de chicha, solamente para cerrar completamente el argumento de cómo Thor se queda en Midgard finalmente, cosa que podrían haber hecho antes de los créditos.
Mi nota: un 7
No hay comentarios:
Publicar un comentario