Otra de esas pelis que, después de oir de soslayo algunas críticas y comentarios, pensaba verla en casita, cuando la querida "mulita" me la trajera. Y otra que me sorprende gratamente.
Reseña rápida con leves spoilers.
Lo principal, por fin, después de tropecientas pelis, podemos ver un Spider-Man 100% reconocible para los lectores de comics (al menos mientras lleva la máscara puesta). Se balancea por los edificios, hace chistes mientras pelea con los malosos, y podemos verlo en casi todas las posturas clásicas del personaje. El traje, el más fiel al clásico de Spidey, mejorando el de la primera parte, e incluso mejor que el usado en la trilogía de Raimi.
Peter Parker es otra historia, sigue sin convencerme demasiado el actor, aunque físicamente (con la boca calladita y sin hacer sus aspavientos dignos de Jim Carrey) me recuerda mucho al Peter de los años 90. Su comportamiento, chulesco en ocasiones, sin llevar el traje si me chirriaba. Y la relación de tira y afloja con Gwen Stacy se veía poco creíble. Al menos ella tiene el destino correspondiente a lo que todos esperábamos (si no fuera así, esta crítica sería diametralmente distinta).
La historia de background, con el tema de los papis de Peter, se va desgranando poco a poco, aunque se ve que quieren seguir sacándole provecho en futuras secuelas (como si de una serie de TV se tratase), y es la parte del guión que más cuesta arriba se me hace, aunque le da sentido final al origen de Spider-Man. Si bien, que todo gire en torno a Oscorp me parece demasiado centralista (aparecen incluso cameos de lo que podrán ser Octopus, el Buitre...), como si en el Universo Cinematográfico de Spiderman solo pudieras tener poderes si estás relacionado con esta empresa (Elektro, el Duende Verde, el propio Spidey, incluso hay un mini-cameo de Felicia Hardy, alias Gata Negra...). Esto me recordaba a los argumentos más irritantes de Smallville, donde todo giraba en torno a las Empresas Luthor.
El problema es que, quitando la mencionada historia de background, que ya venía de su predecesora, el argumento principal, con Elektro y el Duende, es flojillo, como si de un episodio de una serie como Arrow o Agentes de SHIELD se tratase. Solo lo salva el ya mencionado destino de Gwen, y un nuevo origen del Duende Verde, bastante interesante (aunque lamento la falta de protagonismo de Norman Osborn, cedido a su hijo Harry).
Me cabreó bastante que a Rhino se le usara solo para un par de minutos, dejando colgada lo que hubiera podido ser una interesante lucha (y es que encima sale hasta en algunos posters promocionales de la peli).
Por último, como seguramente ya sabréis, intercalan en mitad de los créditos una escena de X-Men: Dias del Futuro Pasado, con una escena donde podemos ver a Mística, Kaos, el Sapo y (creo) un joven Stryker. Ainsss, esta sí que tengo ganas de verla....
En definitiva, una peli para divertirse, para ver a un auténtico Spider-Man en acción, tal y como te lo imaginabas a los 6 años leyendo esos tebeos de Bruguera o Vértice. Mi nota: 6,5
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